Son tiempos de pensar y actuar de forma positiva, con la mirada puesta en el aquí y ahora. Después de mucho tiempo de incertidumbre, miedos, nuevas emociones… todo se va resituando y necesitamos dar luz al nuevo camino que tenemos por delante.

Tenemos la suerte de volver a ver las caras al completo de nuestros alumnos, con su sonrisa y las palabras que ya se entienden mejor. Qué importante es la comunicación verbal y no verbal, también en el colegio, suavizada todos estos meses por la mascarilla.

Este curso el alumnado ha realizado su diario de tutorías que nos han proporcionado desde los Departamentos de Pastoral y Orientación. Los profesores, conscientes de la importancia de la acción tutorial y de su labor en el acompañamiento de los alumnos, han llevado a cabo esta tarea poniendo el foco de atención en la persona, en concreto en nuestros pequeños de 1º, 2º y 3º de Primaria.

En octubre se ponía de relieve el valor de la fraternidad y el fomento de una cultura del encuentro que es preciso recuperar. Todas las relaciones nos enriquecen, teniendo en cuenta la diversidad personal y fomentando la inclusión y la igualdad.

Posteriormente, coincidiendo con el Adviento, nuestro alumnado descubrió a las personas luz, personas de trato amable, paz en la tormenta y fortaleza ante la adversidad. Ellos mismos son luz en nuestro camino y nos iluminan con risas contagiosas, palabras cariñosas, abrazos desinteresados e ideas ingeniosas.

En enero la palabra solidaridad cobró fuerza. Nos invitaron a adentrarnos en nuestro corazón y compartir algo de nuestro yo sin esperar nada a cambio. Hicimos visible nuestra generosidad con algunos gestos comunes que compartimos con todo el colegio.

En el tiempo de Pascua llegó la reflexión, el perdón y la reconciliación, pero también la alegría de nuevos proyectos e ilusiones. Fue otro buen momento para intentar conocernos más y dar lo mejor de nosotros mismos.

“Vosotros, los jóvenes, podéis conquistar el mundo” Pedro Poveda

Pronto los alumnos darán por cerrado su diario de tutorías del curso 21-22, también con una palabra con la que definan todo lo vivido. El vínculo, la interacción, la comunicación, el encuentro, la sonrisa y el abrazo que hemos recuperado son reparadores. Nuestro alumnado necesita sentirse seguro emocionalmente y establecer relaciones positivas con sus iguales y los adultos de referencia.

Este curso, de un modo especial, les hemos acompañado en este recorrido con calidez, escucha activa, aceptando todos sus sentimientos y dando cabida a todas las emociones. En el momento del “Buenos días” también hay espacio para poner de relieve estas vivencias.

La acción tutorial en estas edades se realiza día a día, por ello se ha dedicado mucho tiempo y se han retomado con ilusión actividades que proporcionan alegría y bienestar, a la vez que seguimos potenciando la autonomía y el esfuerzo.